El pintoresco municipio de Sevilla la Nueva se encuentra en una ubicación estratégica dentro de la Comarca Sur, en la cuenca del río Guadarrama, a tan solo 38 km al oeste de la vibrante capital, Madrid. Esta encantadora localidad forma parte de la atractiva zona turística de Madrid, y su cercanía a importantes centros urbanos como Madrid, Majadahonda y Móstoles, sumada a sus excelentes conexiones de transporte, ha propiciado un constante crecimiento en los últimos años, convirtiéndola en una opción cada vez más atractiva para quienes buscan combinar la tranquilidad de un entorno rural con la proximidad a la vida urbana.
La rica historia de Sevilla la Nueva se remonta a la época de la Reconquista, cuando la región fue repoblada tras ser abandonada por la población musulmana. Los colonos que se establecieron en este territorio procedían del pueblo toledano de Sevilleja, lo que inicialmente llevó a la denominación de "Sevilleja la Nueva". Con el paso de los años y por razones fonéticas y de comodidad, este nombre evolucionó hasta la denominación actual de Sevilla la Nueva, una localidad que ha sabido conservar su esencia histórica a lo largo de los siglos.
El municipio se encuentra dentro de la cuenca del río Guadarrama, con la particularidad de que algunos arroyos pertenecen a la cuenca del Alberche, a través del río Perales. La presencia de diversas áreas de vegetación, entre las cuales destaca la hermosa dehesa del Boyal, enriquece el entorno natural de Sevilla la Nueva, brindando a sus habitantes y visitantes la oportunidad de disfrutar de la belleza del paisaje y de conectar con la naturaleza.
El casco histórico de Sevilla la Nueva es un verdadero tesoro para los amantes de la cultura y la historia. Uno de los lugares más destacados es el impresionante palacio del Duque de Baena, también conocido como La Casa Grande. Este palacio, que data del siglo XVII y presenta un estilo arquitectónico herreriano, ha sido objeto de restauración entre los años 1985 y 1987, y en la actualidad cumple un valioso rol como centro cultural y sede de la biblioteca municipal. A lo largo de su rica historia, este palacio fue hogar de notables personalidades como Gonzalo de Córdoba (descendiente de El Gran Capitán) o Ángel Saavedra, duque de Rivas, quienes ostentaron el título de conde de Sevilla la Nueva, dejando una huella indeleble en las estancias de esta histórica edificación.
En la plaza de Sevilla, donde se alza el mencionado palacio, también se encuentra la iglesia parroquial de Santiago Apóstol. Aunque su importancia arquitectónica no es el principal reclamo, su interior ha sido recientemente restaurado, resguardando en su seno imágenes de los patronos locales, como el Santísimo Cristo del Consuelo y Santa Bárbara, símbolos de la fe y la tradición de la comunidad.
El entorno natural que rodea Sevilla la Nueva es un regalo para los sentidos, un hermoso paisaje que invita a la contemplación y a la práctica de actividades al aire libre. Los aficionados al senderismo y el cicloturismo encontrarán en este lugar un paraíso para disfrutar de sus aficiones. La Dehesa Boyal, que se encuentra en la parte occidental del término municipal, es un ejemplo ilustrativo de este tipo de entornos naturales que ofrecen la oportunidad de conectarse con la tierra y disfrutar de momentos de esparcimiento en plena naturaleza.
Para aquellos que sientan curiosidad y deseen explorar más a fondo las maravillas de Sevilla la Nueva y sus alrededores, hacemos una recomendación enfática: no dejes de visitar el Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama. Este parque es una auténtica joya natural que te permitirá sumergirte en la belleza, la diversidad y la riqueza ecológica de esta región, un regalo para los amantes de la naturaleza y la aventura, una oportunidad única para conectar con el entorno y descubrir el esplendor de esta tierra que guarda tesoros por descubrir en cada rincón.